sábado, 30 de agosto de 2014

Wish you were here

Recuerdo cuando me dedicaron esa canción. Fue el 14 de septiembre de 2010 a las 19:19. Tengo una memoria asombrosa, verdad? Bueno, no. Pero recordé el historial donde está la conversación. Aunque también recuerdo que la verdad no me gustó. No sentí que fuera justo. Recuerdo muy bien el sentimiento, pero sigo siendo incapaz de exteriorizarlo. Sólo se me ocurre la palabra "injusticia".

Seré una genio y te cumpliré el deseo (espero).

viernes, 29 de agosto de 2014

Tengo mi cabra, me falta el violín

Mi vida está en su mejor momento.

Ahora de verdad puedo decir esa famosa frase "todo pasa por algo". Si las cosas no se hubieran dado como lo hicieron estos últimos meses, nada de lo que estoy por vivir se habría concretado.

En primer lugar, estoy a pocos días de que aprueben mi tesis y así poder graduarme, AL FIN.

Y en segundo, aquí me voy a extender un poco. Tengo los medios para hacer mi tan ansiado viaje. Por un lado es lamentable que ya no sea a México como lo había dicho con anterioridad. Pero por otra, será el viaje que quiero realizar desde hace casi seis años. Es simplemente algo que todavía no me creo (faltan un par de detalles para asegurarlo, pero por el momento hay 80% de probabilidades de ir). Estoy muy emocionada y no paro de imaginarme cosas. No recuerdo la última vez que me sentí así, pero sin duda será una de las mejores experiencias de mi vida. Además, implica a una persona importante en mi vida, a quien están dirigidas algunas entradas de este blog.

Me siento muy bien y feliz. Es tan bonito no tener que dar explicaciones a nadie de mis actos y mis malas decisiones. En realidad me hacía falta conocerme en esta etapa. Y la verdad, me caigo muy bien.

El título solo tiene sentido para aquellos que me han acompañado durante años.

jueves, 14 de agosto de 2014

Decisiones estúpidas

Todos tomamos decisiones estúpidas. Pero creo que estaba abusando del privilegio. Así que decidí solucionarlo por las buenas.

A veces, sólo a veces, está bien escuchar lo que dice la gente. Porque sé que quieren lo mejor para mí.

No me siento mal con la decisión, pero sí con las consecuencias. Me siento sola de nuevo y eso es algo que odio. Bueno, tampoco es que antes me sintiera muy acompañada, pero al menos era algo.

Siempre querré alguien a quien contarle todas cosas insignificantes de mi día y escuchar las suyas. Al final no importa si hay diferencias, sólo si hay deseo de superarlas y creo que precisamente eso es lo que nunca hay.

Y siguiendo con las decisiones estúpidas me hice un piercing en el ombligo. No duele tanto como pensé, lástima que no puedo hacérmelos en lugares visibles o me matan en mi casa... no es que necesiten muchas razones.